Por la configuración de la plaza, se detectó algunos problemas de humedad en alguna de las líneas de fachada, especialmente en la zona del Asilo, lo que ha motivado acometer una nueva losa de hormigón que proteja las edificaciones de la acumulación de agua.
El alcalde ha podido comprobar el avance de las primeras tareas de refirme y protección en suelo y la retirada de las baldosas de la superficie, que permitirá generar una nueva área de disfrute ciudadano. Estas obras se plantean como la recuperación y dinamización de un “entorno que muy atractivo, que hoy se encuentra poco aprovechado, y que debemos mejorar para hacer más cómodo y más amable. Más vegetación y nuevos espacios lúdicos para mayores y pequeños servirá para reconvertir este lugar en una plaza preferida por la ciudadanía”.
Para ello, se han proyectado 700 metros de zona verde en la plaza, con medio centenar de árboles nuevos y más de 500 plantas autóctonas y aromáticas.