Cerdán considera que esta “clara apuesta por acelerar las obras beneficiará a la ciudad de Villena, puesto que hace más fácil cumplir el objetivo de convertirnos en ciudad logística y de distribución de mercancías, tanto desde plataformas ferroviarias como por carretera”. El primer edil considera que la conexión directa con Europa y el puerto de Algeciras – punto final del futuro Corredor Mediterráneo – hace que sea más fácil situarse estratégicamente en ese punto, puesto que nos permite estar equidistantes con nudos estratégicos como los puertos de Valencia y Alicante, la conexión directa con Madrid y el ramal hacia el norte del litoral mediterráneo hacia la Europa central”. Para el acalde de Villena, se trata de un atractivo más que facilita la recuperación de la ciudad como polo industrial, gracias a la capacidad de atraer empresas por su conexión estratégica, la versatilidad de su suelo industrial y el interés que despierta un posible nodo logístico dentro de la red paneuropea.
Villena propone a las administraciones autonómicas y estatales la ubicación de un puerto seco, una Zona de Actividades Logísticas (ZAL) junto al actual polígono industrial de Bulilla. Este espacio a desarrollar permitría la operatividad de trenes de 750 metros de longitud en un espacio plano, con acceso directo a la autovía A-31, bien conectado con la zona industrial de la Foia de Castalla y L’Alcoià, y en la línea del actual corredor empresarial del Vinalopó que comunica directamente con Elche.