Esta novillada, que se celebrará por imposición con chantaje y amenazas a un equipo de gobierno municipal, no solo es un evento subvencionado por la Generalitat con nuestro dinero, que debería destinarse a iniciativas que promuevan el bienestar social y la mejora del medioambiente, sino que intenta perpetuar una tradición cruenta cuestionada y repudiada cada vez más por la sociedad española y villenera y que implica un sufrimiento brutal e innecesario para los novillos.
Estos jóvenes toreros inexpertos, que acaban de salir de la escuela de toreos también financiada con dinero público, provocan una agonía prolongada en los animales, quienes enfrentan una muerte lenta y dolorosa, ya que a menudo no aciertan en las estocadas y descabellos y finalmente apuntillan a los animales varias veces sin éxito, hasta darles muerte.
Los animales que se utilizan en las novilladas son jóvenes, de entre 2 y 3 años, llenos de ingenuidad y curiosidad, a los que se les obliga a luchar totalmente desorientados en un escenario donde sólo encuentran sufrimiento y muerte. Precisamente, los aspirantes a toreros, aprovechan esta inmadurez de los novillos, para practicar a ejercer la tortura y muerte de animales.
Este es el objeto y fin del Circuito Valenciano de Novilladas, el que sirva de prácticas y promoción de toreros que provienen de escuelas taurinas donde con dinero público se subvenciona la tortura de seres sintientes y con conciencia de sí mismos, mientras seguimos con graves carencias en la educación pública.
Por todo ello, es hora de que nos unamos y digamos “¡basta!” a esta crueldad. Debemos enviar un mensaje claro a nuestros representantes:
La cultura evoluciona y se adapta a los valores de cada época y queremos un futuro donde el respeto y la compasión prevalezcan.
Ya que estos representantes, parecen haberse acomodado en la abstención o la no asistencia para eludir temas complicados, esperando a que se resuelvan solos, es nuestra responsabilidad como ciudadanos/as promover un cambio positivo de nuestras tradiciones hacia prácticas más éticas y compasivas.
¡Te esperamos el domingo 6 de octubre, a las 10:30, frente a la Plaza de Toros, para hacer escuchar nuestras voces!