Francisco Berbegal exponía que el ayuntamiento ingresó en 2024, aproximadamente, algo más de 32 millones y medio de euros en impuestos, tasas y otras cuentas. Sin embargo, gastó casi 35 millones de euros por lo que esta situación crea en las arcas municipales un déficit de más de 2,2 millones de euros. “Por lo tanto, el ayuntamiento está incumpliendo la Ley de Estabilidad Presupuestaria de obligatorio cumplimiento desde la pasada anualidad. Por lo que está obligado a actuar inmediatamente para revertir esta situación presentando un plan económico financiero», detallaba el edil popular.

El informe expone que esta “necesidad de financiación” viene originada por tres puntos principales:

– El aumento en el gasto de personal que ha ascendido hasta los 14,8 millones de euros.

– El ayuntamiento solo ha ejecutado el 48 % del presupuesto de inversiones lo que genera desajustes financieros.

– El informe incide de manera significativa en la recaudación de impuestos, ya que durante el ejercicio 2024 los ingresos por esta vía son inferiores en más de 4 millones de euros a lo que estaba presupuestado.

Por último, Berbegal precisaba que las arcas municipales, en cuanto a la tesorería del ayuntamiento, han visto mermadas sus cuentas en más de 4,5 millones de euros. En derechos pendientes de cobro, el ayuntamiento, en 2023, tenía 5,3 millones de euros. Un año después, en diciembre de 2024, la cifra alcanzaba los 7 millones.

Desde el Partido Popular solicitan rigurosidad a la hora de llevar a cabo los presupuestos municipales. “El equipo de gobierno debe ajustar sus previsiones a la realidad económica y mejorar la gestión de los cobros”, aseguraba Berbegal.