Ha sido en la localidad de Villena, donde se ha escenificado este apoyo. En su Casa de Cultura reunidos tanto ayuntamientos como viticultores, bodegueros y medios de comunicación, han puesto en común la necesidad de proteger este “ser vivo que merece ser mirado de una forma diferente y con más atención y sensibilidad por parte de todos los que formamos parte y gestionamos esta comarca” en palabras del presidente del CRDOP Alicante, Jose Juan Reus. Quien añadía que “al valor del vino y el crecimiento de calidad que se está viviendo en estos momentos gracias al ímprobo trabajo de bodegas, hay que añadirle una mayor conexión y conocimiento de lo que significa esta planta en toda la sociedad”.
Así lo ha reconocido también Francisco Iniesta, teniente de alcalde de la localidad, quien daba la bienvenida a los asistentes y reconocía lo que la monastrell ha representado para Villena y “lo que debe representar en el futuro” con una gestión responsable de su cultivo.
En términos semejantes también se manifestaban alcaldes como el propio Fulgencio Cerdán, de Villena, quien lanzaba la idea de internacionalizar su promoción, Lázaro Azorín de Pinoso o Loren Amat, de Monóvar quien volvió a recordar el proyecto de calificar como BIC al Fondillón. El acto lo cerraba el director territorial de Agricultura, Juan Planelles.
También apoyaban el acto, viticultores y bodegueros de la zona, o asociaciones de vecinos convertidos asi en guardianes de este patrimonio vegetal único en esta comarca, considerada reservorio de viñas viejas y muy valiosas en estos momentos.
Los ayuntamientos firmantes del Manifiesto han sido: Hondón de los Frailes, Aspe, Elche, Villena, Elda, La Algueña, La Romana, Pinoso, Monóvar, Petrer, La Cañada, Sax, Salinas, Campo de Mirra, Banyeres de Mariola, y también el de Caudete.
El acto continuó por la tarde en el mismo escenario donde se ha querido homenajear la cultura de la viña y sus vinos con la representación de la obra “Fondillón para dos” de Carlos Maruenda, una obra donde la evocación de la propia Terreta al probar un vino provoca unas divertidas situaciones.