En esta ocasión, los protagonistas fueron Los Frankis, los entrañables personajes de la Retreta que, con su característico sentido del humor, no dudaron en mostrar su apoyo con un mensaje tan rotundo como inspirador: “Hagámoslo. Algo tan simple y tan difícil”.
Los Frankis, que aseguraron haber salido de su “hibernación” para la ocasión, recordaron entre gruñidos y sonrisas cómo ellos sí conocieron la antigua torre y el consuelo que les daba “ver una cara tan fea como la nuestra cada mañana”. En su divertido discurso, apelaron al sentido común y al espíritu villenense: “Sabemos que no es fácil, que hay permisos y trámites, pero también sabemos que querer es poder, y en Villena sobran las ganas. Si todos la queremos, solo falta que alguien diga eso tan simple y tan difícil: hagámoslo”.
Durante el acto, José Ramón Morales, presidente de la asociación El Salicornio, agradeció el respaldo de Los Frankis “por salir de su zona de confort festero y sumarse a una causa que pertenece a todo el pueblo”. Morales entregó además a los protagonistas la torre simbólica, un reconocimiento que se está haciendo llegar a todas las asociaciones que han colaborado en los encuentros.
Como es tradición, Pepe Cabanes interpretó junto al público el ya emblemático estribillo del Orejón, poniendo banda sonora a una tarde que, pese al frío, volvió a reunir emoción, historia y comunidad. El acto finalizó con la habitual foto de familia en las escaleras de la Plaza Mayor, recordando la fecha del próximo encuentro: jueves 27 de noviembre.
Y, como gritaron los Frankis para cerrar el acto: “¡Grouñññ! ¡Que viva Villena y que viva la Torre del Orejón!”