Al parecer, para obtener el visto bueno del Consell, el proyecto ha tenido que recortar sus MW. De esta manera, pasa de 41,2 MW pico (35,4 MW) a 40,7 MWp (33 MW). “Entre otros condicionantes se encuentra el soterramiento de la línea de interconexión de 30 kV, dejar libres ciertas parcelas por riesgo de inundabilidad o para compensar la pérdida de hábitat de la fauna”.

Así, el vallado se extenderá 6.109,76 metros lineales, conteniendo dentro una superficie de 536.908,03 metros cuadrados para los tres recintos. Y dado que la planta se divide en dos zonas, es necesaria la interconexión de la energía producida del recinto más este hasta la subestación. Por ello se ejecutará una línea aérea de 30 kV que unirá ambos recintos.

Además, la planta constará de 61.140 módulos fotovoltaicos de 675 Wp y 165 inversores de 200 kW, que se conectarán entre sí y a unos centros de transformación que elevará la tensión a 30 kV. Para la evacuación de la energía generada en el parque fotovoltaico se prevé la construcción de un tramo de línea aéreo-subterránea de 132 kV, que tendrá una longitud total de 5,81 kilómetros, de los cuales 3,15 kilómetros son aéreos y 2,66 kilómetros, subterráneos. Esta línea eléctrica desembocará en la subestación Villena 132 kV.

Hubo un movimiento ciudadano para impedir la instalación de esta planta y que se ubicara en otras zonas de Villena donde la afección fuera menor. Se recogieron incluso firmas de vecinos y vecinas, y el Ayuntamiento alegó. Por lo que se ve, poco ha valido porque ha obtenido la Declaración de Impacto Ambiental por la Consellería.

P.D. La foto que acompaña a la noticia pertenece a las reuniones que se hicieron con los vecinos para tratar este mismo tema.